Viendo los sucesos de actualidad en Medio Oriente y en África del Norte, PBI se une a la comunidad mundial de derechos humanos haciendo un llamamiento a las autoridades y recordando a todos los otros gobiernos del mundo que deben respetar el derecho de las personas a manifestarse pacíficamente y en forma no violenta. Especialmente, deben respetar la libertad de expresión, asamblea y asociación.
PBI presta particular atención al rol de los defensores de derechos humanos, cuyas actividades no violentas son cruciales para la resolución de conflictos, la estabilidad y los modelos sostenibles de desarrollo en todos los países.
Los defensores de derechos humanos son mujeres y hombres cuya lucha en desventaja es frecuentemente el blanco de amenazas y violencia; las mujeres y los defensores de derechos humanos pertenecientes a grupos minoritarios son, a menudo, particularmente victimizados.
Las autoridades de todos y cada uno de los estados tienen la obligación de proteger y facilitar el trabajo de los defensores de derechos humanos y otros activistas de la sociedad civil - sean ciudadanos del propio país o extranjeros legítimamente ingresados - que luchan para prevenir y remediar los abusos y las violaciones a la ley internacional, tanto en tiempos de paz como en tiempos de guerra.
En este momento, PBI hace un llamamiento específico a las autoridades para que:
- prevengan la intimidación y la violencia contra los defensores de los derechos humanos y garanticen que estos no sean acosados o arbitrariamente detenidos, y
- protejan a los trabajadores de los medios de comunicación, permitan las operaciones de los medios independientes y levanten las restricciones al acceso público a la información.
Sobre PBI
PBI es una Organización No Gubernamental internacional que ha promovido la no violencia y protegido a defensores de los derechos humanos desde 1981. Creemos que la transformación duradera de los conflictos no puede ser impuesta desde afuera, sino que debe basarse en las capacidades, deseos y acciones de la gente local.